
La Ley 2540 de 2025 incorpora el arbitraje en procesos ejecutivos para agilizar la justicia y descongestionar los despachos.
La Ley 2540 de 2025 introduce el arbitraje como mecanismo alternativo para resolver procesos ejecutivos, con el fin de dar mayor celeridad y contribuir a la descongestión del sistema judicial. Este nuevo modelo permite que, cuando exista pacto arbitral, la ejecución de obligaciones se tramite ante árbitros y no ante los jueces ordinarios, garantizando al mismo tiempo el debido proceso y la protección de los derechos de los consumidores.
Un ejemplo de aplicación se observa en los créditos otorgados por entidades financieras. Si en el contrato de mutuo las partes pactan cláusula compromisoria, en caso de incumplimiento el acreedor podrá acudir al arbitraje ejecutivo. En este escenario, el tribunal arbitral asumirá el conocimiento del proceso, decretará medidas cautelares y emitirá el laudo con fuerza ejecutiva, reduciendo significativamente los tiempos frente a la jurisdicción ordinaria.
Ahora bien, la norma también prevé garantías específicas para los consumidores, como el derecho de retracto dentro de los sesenta días posteriores a la firma del contrato, así como la prohibición de que los bancos condicionen el otorgamiento de créditos a la aceptación del pacto arbitral. Estas medidas buscan equilibrar la autonomía de la voluntad con la necesidad de proteger a la parte más débil de la relación contractual.
Otro aspecto relevante son las medidas cautelares, que pueden decretarse incluso antes de la instalación del tribunal arbitral. Esto permite, por ejemplo, que se embarguen bienes del deudor para garantizar el cumplimiento de la obligación mientras avanza el proceso. La ley establece que estas medidas deben tramitarse de manera ágil, con términos cortos y bajo supervisión de un árbitro designado, lo que fortalece la efectividad del arbitraje frente a la mora judicial tradicional
Finalmente, como novedad, la ley contempla el arbitraje social de ejecución para controversias que versen sobre obligaciones de mínima cuantía. En este modelo, las partes no necesitan abogados y los trámites pueden ser adelantados por un único árbitro. Incluso se prevé la participación de estudiantes de consultorios jurídicos de universidades acreditadas en alta calidad, lo que facilita el acceso a la justicia para poblaciones vulnerables y fortalece la formación práctica en derecho.
La Ley 2540 de 2025 representa un avance en la modernización de la justicia en Colombia, al permitir que procesos de ejecución puedan resolverse por la vía arbitral. Esto no solo reduce la carga de los jueces, sino que también amplía el acceso a mecanismos ágiles de resolución de conflictos.
No obstante, el éxito de la medida dependerá de su implementación efectiva por parte de los centros de arbitraje y del conocimiento que tengan los usuarios sobre sus derechos. La pedagogía jurídica y la supervisión estatal serán esenciales para que este nuevo instrumento cumpla con su finalidad de descongestión y eficiencia.
● Fuente:
Congreso de la República de Colombia. (2025, 27 de agosto). Ley 2540 de 2025, por medio de la cual se introduce la modalidad de arbitraje para procesos ejecutivos, con el objetivo de contribuir a la descongestión del sistema judicial. Diario Oficial No. 53.225.
● Fecha de redacción:
28 de agosto
Por: Yenifer Rodríguez Castillo / Abogada.